Yo que soy más rola que el ajiaco,
hoy siento que mi alma solo quiere vivir en la playa.
Yo que nunca aprendí a nadar,
hoy soy experta atravesando olas.
Yo que siempre intento cuidarme de la sal,
hoy disfruto que se me pegue a la piel.
Yo que no paro de bailar,
hoy me siento a observar.
Yo que siempre uso tenis,
hoy hundo mis pies en la arena.
Yo que le huyo a las palomas,
hoy envidio ver como vuelan.
Yo que siempre vivo despeinada,
hoy dejo que el viento me peine.
Yo que nunca me voy a confesar,
hoy le cuento mis secretos al mar.
Yo que canto sin ritmo,
hoy aprendí a tararear al ritmo del mar.
Yo que no me baño los domingos,
hoy pido 5 minuticos más en el agua.
Yo que me sé hasta las propagandas,
hoy las veo pasar volando, sin poderlas atrapar.
Yo que siempre me quedo dormida,
hoy soy feliz viendo como se alargan los días.
Yo que tengo cuidado con los extraños,
hoy les aviso que viene una ola para saltar.
Yo que siempre le tomo foto al día,
hoy prefiero sentarme a pintarlo.
Yo que tengo un ombligo cobarde,
hoy dejo que se asome a tomar el sol.
Yo que odio los gorros de baño,
hoy compre sombreros para que naden.
Yo que siempre vigilo a mi sombra,
hoy dejo que sea tan libre como yo.
No se si es el verano, el sol, la playa o el mar,
el que me enseñó que...
Hoy el piso es de arena,
que el cielo se puede mezclar con el mar,
que ahora, el día siempre tiene de filtro el sol,
que la brisa carga consigo al verano y sus olores,
que los salvavidas son los héroes del día,
que sumergirse en el mar te puede recargar de vida,
y hacer de los fines de semana VACACIONES.
Y que tiene de distinto que sea en New York?
Bueno... pues nada, solo que somos el mar y yo.